Por Santiago Andrés Acosta Palacio
Comunicación e
investigación. Cuarto Semestre
Durante el tiempo de selección de
cursos y posteriormente proceso de matrícula para el segundo semestre del
presente año, se podía apreciar la gran cantidad de cursos electivos que había
para seleccionar, todos con sus aspectos positivos útiles en el diario vivir.
Como su nombre lo indica, son cursos electivos que yo podía decidir si tomarlos
o no, claro, el que escogiera tenía que traer algo positivo para mi crecimiento
personal y educativo.
Comunicación e investigación fue la
materia aceptada, la elegida, pues investigar y comunicar son parte fundamental
del ser humano, ya que estas en conjunto permiten adentrarse en mundos
desconocidos, aceptar y entender nuevas formas y hábitos de vida. El despertarnos cada mañana con una duda o una
inquietud diferente y el deseo de encontrar una respuesta o una solución, es lo
que hace que la vida tenga un valor y un sentido verdadero.
Tengo que confesarlo, en la primera
clase de esta materia sentí que era un curso dirigido para estudiantes
avanzados que ya hubieran iniciado con su proyecto de grado, pero con el pasar
de los días, la lectura de los documentos asignados y las explicaciones del
profesor, todo lo relacionado empieza a tomar otro rumbo, ya las clases se me
hacían amenas, los documentos leídos y los escritos a realizar los hacía con
mayor empeño, pues entendí que “comunicación e investigación” es un curso que permite
abrir la mente, ver más allá de lo habitual y por ende conocer con anterioridad
como será el proceso de realización del trabajo de grado.
El ser humano cuando se equivoca busca
responsables, pues no le gusta sentirse culpable; y me arriesgo a decir que esto lo hace mucha gente tras salir
de clase, la culpa de los vacios en la asignatura es del profesor, del espacio,
de todos, menos de la propia falta de interés. Bien lo dice Elcides Olaznog, en
su columna titulada: “El estudiante frente a la universidad de hoy”: "[...] Mientras uno va a estudiar otro va a mamar
gallo. Mientras uno va a aprovechar el tiempo y la plata de la matrícula, el
otro va a cuadrar la rumba del fin de semana. Mientras uno entra a clase a
mirar el reloj y el celular y a esperar que el cucho se vaya rápido o no vaya a
clase, el otro exige que el docente dicte su clase completa y que le dé
bibliografía, fuentes de estudio. Mientras uno le echa la “agüela” al profe que
le pone una tarea, el otro la disfruta o, por lo menos la acepta y es
consciente de que esa tarea le puede ayudar a crecer intelectualmente".
Hablar con el profesor del curso, respecto a temas tratados
en la asignatura, me ha permitido entender aspectos con mayor capacidad,
sobretodo, en aquella investigación, una prueba piloto que se realizó a la
largo del semestre, donde en conjunto con los compañeros de trabajo nos
empapamos del tema seleccionado, abrimos nuestra mente y empezamos a comprender
aspectos que diariamente pasábamos por alto, pues los veíamos como algo
‘cotidiano’.
En estos momentos siento que tomé la decisión acertada al
preferir el curso “comunicación e investigación” como asignatura electiva antes
que las otras, pues aprendí técnicas que si las se aplicar de buena manera en
el transcurso de mis estudios y algún día en lo laboral, seguramente lograré
muchas cosas buenas. Aprender a realizar buenas formas de recolección de datos
como fichas bibliográficas y de observación, objetivos generales y específicos
que marquen un punto de partida para proyectos a realizar, además, métodos
científicos o de investigación como por ejemplo el árbol de problemas que ayuda
a jerarquizar por categorías (causas, problema central, efectos); todo esto con
un mismo fin, el de aprender a investigar.
Por todo lo escrito anteriormente y otra cantidad de aspectos
que los dejo para mi formación personal, es que propongo para mi casilla de
autoevaluación una nota no menor de 4.6, pues estoy más que seguro que esta
asignatura será de gran ayuda para lo que viene, no solo en los aspectos
académicos, sino también en el diario vivir. Aquellos tiempos en que todo era
igual han quedado atrás, ahora indagar, preguntarme y conocer es lo que empieza
a guiar mi rumbo y mi camino hacia el profesionalismo.
Cabe resaltar que durante el periodo de tiempo que ha durado la asignatura he asistido a todas las clases con muy buena disposición, los trabajos los he realizado y su calificación por parte del docente ha sido buena, además que mi relación con los contenidos del curso ha sido amena y he logrado comprender los objetivos del mismo.